Que si soy un tipo supersticioso? Pues verán, desde el pasado viernes no tengo otro remedio que serlo. Hasta donde ustedes saben, todo había ido sobre ruedas (este es un guiño a mi abuelo y su nueva sillita): Cipriano aparcado frente a la tele con el mando a distancia y el cognac y yo en mi coche, camino de casa de Matías y con dos entradas para "Els joglars" en el bolsillo.A las ocho en punto llegamos a Gijón (como es costumbre en mí) sin una gota de gasolina en el depósito, por lo que decido repostar antes de que el coche se muera por inanición. Nada más aparcar junto al surtidor mi mirada se desvía (debería haberme quedado ciego en ese preciso instante) hacia el coche que está repostando a mi lado. El tío era tan pelirrojo que daba dentera. Era de este tipo de personas con el pelo de un naranja tan intenso que molesta a la vista, el cutis extremadamente blanco y la cara llena de pecas que, aunque trates de evitarlo y para desagrado de tu estómago, tu mente se empeña en imaginárselas en pelotas (aaaggggghhhhhh!!).

Supongo que estaréis pensando que me estoy ensañando con los pelirrojos; yo también lo pensaría si no hubiera estado en aquella gasolinera y Matías no me hubiera dicho: "Mira que tío más pelirrojo! Coño, con la mala suerte que traen".
"¿Mala suerte?". Eso fue exactamente lo último que dije antes de que el "oxidado" nos fulminara con la mirada y la mitad de la llave de mi coche se quedara dentro del contacto. Miré alternativamente la media llave en mi mano, la cara de Matías y el mapa lleno de pecas que me observaba desde el otro lado de la ventanilla. Pero qué coño había pasado? Volví a introducir la llave en el contacto y la giré cruzando mentalmente los dedos (no quiero ser pesado, pero ya sabéis que físicamente para mí no existe esa posibilidad. Jodido Creador de mierda!!). En ese momento el ruido del motor me sonó infinitamente mejor que cualquiera de las canciones del último disco de Najwajean (que ya es decir!. Otro momento delicioso: Najwajean, "Till it breaks"; haganme el favor de no perderselo). Bueno, el contacto funcionaba; ahora necesitaba saber si la medio-llave sería capaz de abrir el depósito de la gasolina. Vamos, ánimo chicos, se admiten apuestas!!
Estaba claro, verdad? El puto pelirrojo se piró en su coche (rojo, por cierto; que hay que tener cojones para tener ese físico y comprarte un coche rojo) y nosotros nos quedamos con el gasolinero que después de varios intentos dejó la puta cerradura por imposible. Hasta dónde podíamos llegar con las cuatro gotas que debía haber pegadas a las paredes del depósito era una incógnita que no tendríamos más remedio que despejar antes o después.
Decidimos aparcar cerca del teatro y olvidarnos del problema del coche durante las casi dos horas que dura "La cena", última obra de los siempre geniales "Els joglars". Personalmente me quedo con "Dalí" o "En un lugar de Manhattan" aunque, sin lugar a dudas, "La cena" también merece la pena. Mi amigo Pablo (que de escenarios sabe un rato) asegura que "El retablo de las maravillas" es una auténtica maravilla (y valga la redundancia). En fin, que verles sobre las tablas es, y será siempre, un verdadero placer.

Bueno, pues encantados con los chicos de Albert Boadella, salimos del teatro y nos fuimos en busca del coche. Se acababa de romper el hechizo; con los últimos aplausos en el Jovellanos, nuestra carroza se había convertido en calabaza y la realidad volvía a ponernos entre la espada y la pared.
Llovía a cántaros cuando nos metimos en el coche y emprendimos el viaje de vuelta que debía llevarnos directamente hasta nuestras casas, pero que nos dejó exactamente en mitad de la puñetera autopista.
Esperamos una hora y cuarto a que llegara la grúa y matamos el tiempo haciéndonos unas pajillas, pero sin mariconadas, sólo por aburrimiento. Que no, padre de los nueve, que es una broma plagiada al abominable "Torrente" (por qué nadie mató a Santiago Segura después del rodaje de "El día de la bestia"? Todos habríamos salido ganando). Además un contacto físico de esa envergadura (sí, he elegido la palabra con toda la intención) con la actual pareja de mi exnovia es, cuando menos... pelín raro, no? En fin, que lo que hicimos fue hablar (civilizadamente) del tema que nos había llevado a acabar a hostias. Después de la charla sentí pena por Matías; él se había llevado la peor parte: las hostias y a Leandra.

Cuando la grúa nos dejó por fin en el centro y se llevó mi coche al taller, Matías insistió en invitarme a una copa. Acepté con la condición de que sólo fuera una; era un poco tarde y tenía que acostar al abuelo Cipriano; eso si no me lo encontraba fiambre en su silla de ruedas por una sobredosis de cognac o de "Dónde estás corazón?".
En fin, que esa noche aprendí varias cosas: que los pelirrojos dan mala suerte, que la carne humana tiene cierto regusto a carajillo (guiño para los espectadores de "La cena") y que la combinación silla de ruedas, botella de cognac y casa con el pasillo estrecho da como resultado una tremenda meada que tienes que limpiar antes de irte a la cama porque si no te jode el parquet de por vida.
Señoras y señores, como siempre... es un placer su virtual y plasticosa compañía; que pasen un buen día.
13 comentarios:
Qué razón tiene Cipriano!!!! Viva Cantizano!!!
Santiplastic, tu siempre dándonos clases gratuitas. Está bien saber que los pelirrojos son gafes. Más que nada pa estar prevenida cuando entre alguno por la tienda (El Peñalba. Siempre es un buen momento para hacer un regalo: bombones, pasteles, dulces, detalles para bodas...y un poco de publicidad). Bueno, pues si entra alguno que lo atienda Asunción, qué para eso es la encargada, no?
Bueno, Santiplastic mucha paciencia con el abuelo. Cipriano, ye como ye (un salido mental) pero también tien cara de buena persona.
Ah y otra cosina, a ver si se te arregla el tema del coche.
Te dejo que entra clientela.
Abracinos
Ayyyyyyyy, dios mio!!! q buena la foto final!!!!! Santi, yes mundial no me canso de decirlo. Se nota que soy fan no? Esta vez me he perdido a Els Joglars, pero he visto Dali y en un lugar de Manhattan y son geniales, hacen reflexionar mucho y eso en estos tiempos hace falta. Por cierto, lo de la llave es muy bueno no? pero como puede ocurrir eso? Puedes echar loctite en la parte que está fuera y cuando se una con la que está en el contacto igual se arregla no? Santi, debe ir siendo hora de comprarse un coche.
Besos plasticosos.
QUÉ FOTOS!!!QUÉ HISTORIAS!!!SANTI!!!Pero no tienes un finde normal? de plástico sin más?
Me encanta leerte!!!
VIVA CIPRIANO! VIVA EL BLOG DE SANTI! ABAJO LAS DEPENDIENTAS DE PEÑALBA!ABAJO CANTIZANO!
Besinos de plastikino . PuI .
Por cierto...lo de las pajillas no me quedó claro...es todo bromina...no? seguro que sí...este Santi...
Sin duda una de las mejores historias que has contado Santi, escojonada llevo toda la mañana imaginandome al gafe salir escopetado con su vólido rojo y a vosotros con cara de idiotas mirar como el gasolinero intentaba arreglar algo que a mi juicio era practicamente imposible.Muy fuerte Yeni !!!!
Sinceramente creo que va siendo hora de cambiar ese coche, no hay vuelta de hoja, sino mirarme a mi, sin un duro ( literalmente ) y con un coche que parece una furgoneta pa llevar a la super familia numerosa que tengo, ay que joderse ...
Vale, me doy por aludido. Estoy cansado de tirarle el picado a la Kika y la tía pasando de mi. Pues hasta aquí he llegado, reina (aunque, insisto, estás más rica que los bombones que despachas); me he cansado de tu pasotismo. No has tenido ni una palabrita amable para este pobre infeliz que bebe los vientos por tí!! Se acabó, me oyes? Chicas, a partir de hoy se abre la veda; el Jaime está libre como un tasis!!! Lo siento Kika, has perdido tu oportunidad. Por cierto, sólo despachas o también eres maestra chocolatera como los de "Lindt"? Saludinos pa todos.
El Jaime.
Hola Jaime. Antes que nada perdona que haya tardado en contestar pero es que soy muy tímida y me cuesta un poco arrancar. Yo estaría encantada de quedar contigo. ¿Qué te parece si nos vemos este fin de semana? Si me dieras la oportunidad de recompensarte por la larga espera. Me permites organizar una cita? No te vas a arrepentir, te lo aseguro.
Besos y muchos abrazos.
Pero Santi yo te tenía por un ser, plasticoso eso sí, pero racional... Ahora me sales con que los pelirrojos traen mala suerte... eso son supercherías típicas de la Edad Media. Pasando ese detalle por alto he de decirte que te compadezco mucho, vaya putada, sé lo que es que el coche te deje tirado y tener que esperar a la grúa. Bueno todo tiene su lado bueno ¿no? has hecho las paces con Matías y tienes una anécdota para reírte cuando definitivamente te olvides de Leandra. ¡¡Viva Cipriano y muerte a Cantizano!! Es en sentido figurado a ver si van a pensar que soy la Obregón. Berto
No sé, kika... estoy muy dolido, reina, pero por otra parte estás tan rica que... vale, me comeré mi amor propio, pero mira a ver si te apañas pa robarme unos bomboninos de esos ricos que despachas (los de licor no me gustan, que lo sepas). Saludinos pa tol mundo, especialmente pa la Yeni (tu "macarrismo" me pone, amiga).
El Jaime.
Jaimeeeeeeeeeeeeeee.
Yo soy tu REINA. Olvídate de la KIKA, va de dura pero en el fondo es un pedazo pendón.
La muy guarrilla dice que te va a recompensar por la larga esperaaaaa, ome por Diossssssss
Ella calienta, calienta, calienta pero luego te rompe el corazón.
A Dios pongo por testigo que tú será mi galanzzzzote.
Porfaplis no quedes con ella este finde, yo se que soy un poco pava, pero intentaré cambiar para poder estar en tu onda "tronco".
Así te molo más colega???
Solo te pido paciencia, durante mi peregrinaje a la macarrería.
Me voy corriendo a quitarme la diadema y a desmelenarme como "Amy", la hija del bodeguero.
Chaito amor.
Perdón, mmmmmmm, un beso en to los morros chatooooo.
Maripuchi = La Mari
esa pendejada de que los pelirrojos dan mala suerte lo deijeron los putos ormanos hijos de su concha madres es mentira y yo no soy pelirrojo soy negro pero mi prima si lo es eres un puto supersticioso hijo de tu grandisima putA MADRE
oye amigo, esas kosas no s'acen, iop soy pelirroja y no doy mala suert!! si tubist mala suerte es x pnsar kosas malas d la gente, (kmo k'ese ombre pelirrojo t dio asco) x eso tubist mala suert.
Es una vergüenza que incultos descerebrados sigan publicando estas idioteces.
Tus razonamientos basados en el tipo de la gasolinera dan asco.
Es como si alguien hiciese un blog diciendo que los morenos son todos unos psicópatas asesinos porque Bin Laden y Hitler eran morenos.
Por culpa de la gente como tu, los niños siguen pegando a los pelirrojos cuando ven las estupideces que se cuentan sobre ellos en sitios tan irresponsables como en este blog.
Querido amigo anónimo, hace demasiado tiempo que no escribo en el blog porque esta historia nació con un principio y un final y hace muchos meses que decidí echar el cierre, pero su comentario me ha calado tan hondo... que no he tenido más remedio que reaparecer para decirle que yo (el autor del blog, no el personaje) soy más pelirrojo que la madre que me parió que, en menor medida, también lo era. Lo siento pero... si no ha sido capaz de percibir el tono en que se escribía este blog... sólo puedo desearle que trate de cultivar con un poquito más de ahínco su sentido del humor. Ahora sí, me va a permitir que adopte el tono no del autor, si no del personaje, para decirle que, con todo cariño, le dedico una sonora pedorreta, y no precisamente con la boca si no con mi culo peludo... y pelirrojo. Gracias por asomarse al irreverente mundo de Santiplastic. Un afectuoso saludo.
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